lunes, 5 de marzo de 2012

CINCO MINUTOS

En cinco minutos se decide una vida.
En cinco minutos se halla una salida.
En cinco minutos transcurre una canción.
En cinco minutos se abre un corazón.

En cinco minutos se dictan condenas.
En cinco minutos se rompen cadenas.
Tanto lo grande como lo diminuto;
todo puede ocurrir en cinco minutos.

Como la falsa sonrisa
del presentador de televisión,
que quiere subir su audiencia
con  mucha desesperación.
Como la tierna caricia
de un niño de la calle;
que te toca el pelo
en un hermoso detalle.
El tiempo se vuelve tan astuto,
que al final todo se reduce
en cinco minutos.
Y nada más.

En cinco minutos yo te saludo.
En cinco minutos yo me desnudo.
En cinco minutos callo el silencio.
En cinco minutos yo te sentencio.

En cinco minutos una madre y su hijo se abrazan.
En cinco minutos el sol y la luna se casan.
Tanto lo grande como lo diminuto;
todo puede ocurrir en cinco minutos.

Como el callado amante
que abandona en puntas de pie;
el lecho y el techo
de la esposa infiel.
Como el gran cantante
que baja del escenario;
y tiene que seguir infeliz
a cumplir su itinerario.
El tiempo se vuelve tan astuto,
que al final todo se reduce
en cinco minutos.
Y nada más.

En cinco minutos!


                El Aprendiz

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